Hoy os dejo una receta sencilla, rápida, que se hace sola y que os va a encantar.
Es muy resultona, si tenéis un picoteo en casa, para los menús semanales, para cuando no tienes ni tiempo ni ganas y quieres cenar tan ricamente y para cuando quieras.
Necesitamos que nos corten los filetes muy finos, muy finos.
También podemos utilizar carne picada, ponerla entre papel film y aplastarla con las manos.
Si vas mal de tiempo, puedes comprar la mahonesa y el pesto, pero para bordarlo, en los ingredientes de la salsa te dejo el enlace para hacerlo casero y bien rico.
No te pongo cantidades, ni de carne, ni de queso, porque como verás esto va un poco a ojo. Añade si necesitas más queso y listo.
Empezamos,
INGREDIENTES (para los filetes)
- Filetes de pechuga de pollo o pavo finamente cortados
- Queso parmesano rallado
- Perejil o albahaca
INGREDIENTES (para la salsa)
Empezamos preparando la salsa. Una vez que tengas la mahonesa y el pesto,(el pesto del enlace está hecho con kale, puedes sustituirlo por hojas de albahaca), mezcla al gusto, poniendo más de una o de otra en función de tu gusto. Reservamos.
En un plato ponemos el queso rallado o lo rallamos nosotros, junto con el perejil o la albahaca picada finamente.
El queso parmesano es muy sabroso, yo no le pongo sal, pero si quieres añade una pizca.
Pon una sartén antiadherente al fuego, SIN NADA DE ACEITE, y espera hasta que esté bien caliente.
Mientras tanto pasa los filetes por ambos lados, por la mezcla anterior y presiona para que se quede pegado a la carne.
Llévalo a la sartén. Cuando veas que se tuesta ligeramente, dale la vuelta para que se haga por la otra cara.
Termina con todos los filetes y llévalos a un plato acompañados de la salsa que tenemos reservada.
Listo.