Es tiempo de helados y nosotros seguimos preparándolos en casa. Hoy haremos Comtessa, uno de los viejunos que arraso en los ochenta, ¿os acordáis?
No había celebración donde no estuviera presente, posteriormente paso a llamarse Viennetta y hoy sigue comercializándose.
Independientemente de la calidad, lo más irresistible de este helado eran las crujientes y finas capas de chocolate.
El original era de nata y chocolate, así que hoy vamos a prepararlo en versión polo, pero si quieres puedes hacerlo en versión grande duplicando las cantidades.
Empezamos,
INGREDIENTES (para 6 unidades y mas)
- 250 gr de nata para montar
- 1 clara de huevo
- 4 cdtas de azúcar en polvo
- unas gotitas de vainilla
- 50 gr de chocolate
Derretimos el chocolate al baño María. Sobre una hoja de papel de horno y con ayuda de un pincel de silicona, vamos dando pinceladas del tamaño del molde del helado, para hacer las capas.
Metemos las láminas al frigorífico hasta que estén bien frías.
Vamos a montar la nata, que estará muy fría, yo la dejo 10 minutos en el congelador antes de empezar.
Cuando veas que la nata monta ligeramente, añade el azúcar poco a poco y la vainilla.
No es necesario que dejemos una nata montada en exceso. Reservamos.
Ahora montaremos a punto de nieve la clara de huevo. Ya sabes que el recipiente tiene que estar muy limpio, de lo contrario puede que no monte.
Unimos con movimientos envolventes hasta que esté bien mezclado.
Ponemos una fina capa de la mezcla de la nata, luego una lámina de chocolate, que sacaremos con cuidado, otra de nata y así hasta terminar con nata. Yo le puse cinco capas. Te va a sobrar mezcla de nata, que puedes aprovechar preparando más o añadiendo unas pepitas de chocolate.
Nivelamos la nata y llevamos al congelador durante un mínimo de 8 horas.
Sacamos y ponemos unos hilos de chocolate y listo.