Ya sabéis que en casa la verdura no falta, la preparo de un montón de formas distintas para hacerlo más apetecible y os aseguro que esta mezcla queda suave, ligera, sabrosa y riquísima.
Así que vamos con un plato de lo más completo, unas albóndigas de berenjena, que acompañan un plato de pasta, con salsa de tomate y un toque de parmesano.
Es una elaboración sencilla, rápida, saludable y una forma estupenda de comer verdura.
Estas albóndigas puedes especiarlas a tu gusto, añade más o menos, según la intensidad que quieras darle.
Empezamos,

Albóndigas de berenjena con pasta
INGREDIENTES (para 4 personas aproximadamente)
- 2 berenjenas de tamaño medio
- 1 cebolla grandecita
- 1 diente de ajo
- 1 cucharadita de orégano seco
- 1 huevo
- 4 cucharadas queso parmesano rallado
- 9 cucharadas soperas de avena en copos
- pimienta
- sal
- aceite de oliva
- 2 cucharadas de harina de avena (o la que prefieras)
- ajo molido
- pasta 80 gr por ración aproximadamente (macarrones, espaguetis, tallarines…)
- salsa de tomate
Empezamos pelando y picando la cebolla en trocitos muy pequeños y los añadimos en una sartén con un chorrito de aceite a fuego medio-alto.
Salamos y mezclamos de vez en cuando.
Mientras tanto lavamos y pelamos la berenjena y la partimos en trozos muy pequeños.
Añadimos a la sartén y dejamos que se cocinen hasta que veas que están bien blanditas, removiendo de vez en cuando para evitar que se peguen.
Añadimos el diente de ajo picado, el orégano seco, mezclamos y comprobamos el punto de sal.
Apartamos y dejamos que enfríe un poco.
Añadimos el huevo, el queso parmesano (dejaremos un poco para espolvorear al terminar el plato), los copos de avena y un toque de pimienta. Mezclamos y reservamos durante 10 a 15 minutos para que la avena se hidrate.
Si ves difícil de formar la albóndiga, puedes añadir más copos de avena hasta conseguir que compacten y poder darles forma. Yo las dejo más bien blanditas porque me gusta que queden suaves.
En un bol pequeño ponemos las dos cucharadas de harina con una cucharadita de ajo molido y con la ayuda de un par de cucharillas vamos dando forma a las albóndigas.
Las rebozamos por la mezcla de harina y ajo y redondeamos nuevamente.
Vamos poniendo las albóndigas en una sartén a fuego medio con 3-4 cucharadas de aceite y vamos echando las albóndigas. Movemos la sartén para que se den la vuelta y se hagan por todos los lados. Reservamos.
Cocemos la pasta según las indicaciones del envase.
Escurrimos la pasta, ponemos en un plato y añadimos unas cucharadas de tomate frito, las albóndigas y un poco de parmesano rallado.
Listo.

Albondigas de berenjena con pasta