ENVOLTORIOS ECOLOGICOS

¡¡¡Hola a todos!!! Vamos con la propuesta de hoy, de forma que podamos sustituir el uso de estos envoltorios por el plástico o el papel de aluminio y además hacerlos reutilizables.

Os aseguro que es un inventazo y tan fácil de hacer, que mi hija y yo estamos que no paramos haciendo envoltorios ecológicos para casa y para regalar a diestro y siniestro.

Desde siempre he visto a mi madre, guardar aceite para hacer jabón, empapelar paredes, reciclar muebles, aprovechar los tarros de cristal y utilizarlos como tuper, hacer una camisa de un retal …

Con estos antecedentes os podréis imaginar que tengo debilidad por hacer, aprovechar, reciclar y dar nueva vida a cualquier objeto que se cruce en mi camino.

Hace unas semanas me lance a preparar el papel ecológico del que hoy os hablo y después de hacer pruebas os animo y recomiendo que lo hagáis en casa.

He utilizado para alimentos frescos, por ejemplo guardar medio tomate o un trozo de aguacate, para envolver queso, de tapa y claro está, para convencerme del todo, he comparado con el que venden.

El resultado es estupendo, no puedo estar más contenta, lo estoy utilizando mucho, pero muchísimo, tanto que no os exagero, pero prácticamente no utilizo ni papel film, ni de aluminio.

Con retales de tela que tenía por casa, y con dos ratitos, me he abastecido para  tener siempre a mano. Puedes buscar telas que tengas por casa o elegir trocitos de retales, que los encuentras en las tiendas de telas a precios económicos.

Para limpiarlos, los pasamos por el chorro de agua fría, los dejamos secar o secamos con un paño y listo, al cajón para volver a utilizar.

Con los usos verás que se van formando como marcas, es normal. Al cabo de un tiempo y cuando veas que va perdiendo la capa de cera, volveremos a aplicar el mismo proceso y los dejaremos como nuevos.

La cera que he utilizado es cera virgen de abejas. La he comprado en La Casa de la Miel, en Atocha 95, en Madrid. La venden a granel, puede llevarte la cantidad que quieras y el precio es de 14€ el kilo.

También puedes encontrarla en sitios especializados en miel y venta online.

Siempre es mejor que te den trocitos pequeños para que te sea más sencillo derretirla.

Puedes cortar la tela en forma redondeada, para utilizar en tazas, boles, como tapón de botellas o cuadradas para envolver lo que quieras.

Cunde mucho, así que con poca cantidad tendrás más que suficiente. Las cantidades van a depender del tamaño de las telas. Con las cantidades que te doy vas a poder hacer unas cuantas.

No se recomienda utilizar para envolver carnes o pescados. Tampoco pondremos cerca de fuentes de calor.

Para tapar o envolver, simplemente envolvemos el producto y con el calor de las manos, se adapta perfectamente a la forma.

También os cuento que si, tienen olor a cera, pero he probado con productos frescos y con queso y el olor no pasa a la comida.

Podemos usarlos tanto para conservar en el frigorífico o para llevarte un bocadillo, pero siempre que las temperaturas sean frías, para evitar problemas. Yo envuelto el bocadillo en una servilleta y luego en el envoltorio ecológico y queda estupendamente.

Es de lo más entretenido hacerlos y estoy convencida que os van a gustar tanto, que os vais a convertir en auténticos fans de estos envoltorios.

Estos envoltorios son para que los utilices y reutilices, para que hagas muchos, para que enganches a todo el que tengas a tu alrededor, para regalarlos y para compartir sus bondades. Gracias.

Empezamos,

INGREDIENTES

• 100-200 gr de cera virgen de abejas
• Telas de algodón que no sean muy gruesas
• Un pincel de silicona
• Papel de horno
• Un paño de cocina viejito
• Una plancha (utilizaremos opción sin vapor)

Empezaremos lavando con jabón neutro, tipo Lagarto, las telas que vayamos a utilizar. Dejamos secar.

Cortaremos al tamaño que quieras, yo te recomiendo que comiences con trocitos pequeños o de tamaño medio y cuando tengas soltura empezar con un tamaño mayor.

He derretido la cera al baño María, y mientras está lista prepararemos la mesa de trabajo.

Nos pondremos sobre una superficie o mesa. No te pongas sobre la mesa del salón o sobre una superficie delicada, ya que al trabajar con cera y calor, corremos el riesgo de manchar o quemar.

Yo he puesto sobre la mesa una tabla grandecita, para que el calor de la plancha no dañe la mesa. Encima colocamos un paño de cocina, y sobre el paño una lámina grande de papel de hornear y encima la tela de algodón.

Con ayuda del pincel, esparciremos en el centro de la tela unas líneas de cera, no llegando al borde, ya que con el calor se extenderá. Es preferible que pongas poca cantidad e ir cogiendo la medida, de esta forma no tendrás un exceso de cera en los laterales.

Ponemos otra lámina de papel de hornear sobre la tela y pasamos la plancha sin vapor y a temperatura mínima.

Vamos planchando y arrastrando la cera repartiéndola hasta cubrir totalmente la tela. No presiones mucho, queremos que quede una capa gordita de cera.

    

Quitamos el papel de horno superior y despegamos la tela del papel de abajo.

Airea ligeramente la tela y en segundos estará seca y cogerá rigidez. Déjala sobre la mesa y continua con el resto de las telas.

Si ves que la cera se solidifica, vuélvela a calentar.

Si te queda alguna duda sobre el proceso, puedes consultar en youtube, hay unos cuantos videos que pueden ser de ayuda.

Una vez que los tengas hechos y para igualarlos y que te queden mejor, puedes recortar los bordes, yo he utilizado unas tijeras de zig zag.

Listas para utilizar.