Cuando haces galletas caseras, es difícil volver a comprarlas, porque el sabor de una galleta casera no es comparable con la mayoría de las que encontramos en el supermercado.

Esta es una de las razones, por las que si nunca has hecho galletas, te animes a hacerlas, porque estas son coser y cantar.

Me gustan especialmente porque son saludables y al añadir miel, conseguimos que se parezcan a las barritas de cereales que nos venden pero muchísimo mas buenas, porque a mí las compradas no me gustan nada.

Para elevar estas galletas a un nivel superior, podéis añadir algún fruto seco picado, trocitos de chocolate, canela… En este caso han ido tal cual.

Normalmente no me gustan las galletas muy azucaradas, por eso en la medida que os pongo lo dejo a vuestra elección.

Empezamos,

 

 

 

INGREDIENTES 

• 1 huevo
• 100 gr de copos de avena
• 75 gr de harina de trigo
• 50-70 gr de azúcar (yo puse azúcar moreno)
• 1 cucharada de miel líquida
• 1 cucharada de aceite de oliva
• 1 cucharadita de vainilla (opcional)

 

Precalienta el horno a 180°.

En un bol, batimos el huevo junto con el aceite de oliva y la vainilla. Incorporamos la miel. Si la miel es espesa, caliéntala unos segundos en el microondas, porque necesitamos que esté líquida.

Añadimos los copos de avena, la harina de trigo, el azúcar.

En caso de que le pongas algún fruto seco o chocolate, esté es el momento de incorporarlo.

Mézclalo todo muy bien, para que quede compacto.

Pon un papel de hornear sobre la bandeja del horno, y ves haciendo formas. Puedes poner la masa entre dos hojas de papel film y pasar un rodillo para estirarla. Pasa un cuchillo cortando la masa y listo. Si no quieres complicarte, haz bolitas y aplástalas con la base de un vaso. Para que la masa no se quede pegada al vaso, humedécelo ligeramente con agua.

Puedes ver que la masa se quiebra, no te preocupes, únela, ya verás como al hornearla queda perfecta.

Al pasarla a la bandeja del horno, hazlo con cuidado, para que no se abra.

Hornearemos unos 10 minutos o hasta que veas que están tostaditas por los bordes.

 

 

Yo hago la mitad redondas y menos hechas para que queden blanditas al centro y la otra mitad horneo mas hasta dejarlas tostadas y crujientes.

 

Tendrás que esperar a que se enfríen totalmente antes de probarlas.

Listo.

¡A DISFRUTAR!

 

Olga