Lucía, mi hija la pequeña, pensaba que al final, por insistirme en que compráramos panteras rosas, cada vez que íbamos al supermercado, conseguiría su objetivo.

¡Pues no! Me niego en rotundo a comprar bollería industrial y en casa lo tienen claro.  Pero había que dar una solución al tema. ¡Ojalá todo fuera tan fácil, como hacer panteras rosas!

Ya estamos contentos todos. Hemos hecho las panteras rosas y después de la cata, la conclusión es que como lo hecho en casa no hay nada, que las panteras rosas caseras están infinitamente mas buenas que las compradas y que sabemos lo que nos estamos comiendo.

El sabor del pastel está muy conseguido y lo conseguimos gracias a la ralladura de naranja y la vainilla, con la que tenemos que ser generosos.

Además para conseguir el color rosa y usar un colorante natural, he utilizado polvo de remolacha. No le aporta ningún sabor y queda un color estupendo. Yo lo compro en Spicy Yuli, en el 42 de la calle Valverde, en el centro de Madrid, pero también puedes encontrarlo en herbolarios.

No es necesario tener el molde que yo he utilizado. Puedes hacerlo en un molde cuadrado y partir los pastelitos, o hacerlo en forma de tarta o en un molde con forma de corona… Tenemos un montón de posibilidades, pero hay que probarlo. Os vais a sorprender del sabor y de lo fácil que es hacerlas.

Mi recomendación es que hagas el bizcocho un día antes, para de esta forma rellenarlo mas fácilmente.

Empezamos,

 

 

INGREDIENTES (para el bizcocho)

• 150 gr de mantequilla a temperatura ambiente
• 220 gr de azúcar blanca
• 130 ml de leche
• 3 cucharaditas de vainilla en pasta
• 2 huevos
• Ralladura de una naranja mediana
• 200 gr de harina de repostería
• 1 cucharadita de levadura de repostería
• 1 pizca de sal

 

INGREDIENTES (para el relleno)

• 200 gr de nata para montar
• 1 cucharada de queso crema
• 1 cucharada de azúcar en polvo

 

INGREDIENTES (para la cobertura)

• 1-2 tabletas de chocolate blanco
• 2 cucharaditas de polvo de remolacha

 

ELABORACION DEL BIZCOCHO

Precalentamos el horno a 180° con calor arriba y abajo.

Batimos la mantequilla con el azúcar, hasta que esté bien integrado.

Añadimos los huevos, la leche, la ralladura de naranja y la vainilla y batimos.

Incorporamos la harina tamizada junto con la levadura y la sal y mezclamos solo hasta que esté integrado.

Engrasamos el molde, espolvoreamos con harina, ponemos el molde boca abajo y le damos un golpe en la base para eliminar el exceso de harina.

Llenamos los moldes hasta 1/3 de su capacidad y horneamos durante 15 a 20 minutos.

Sacamos, dejamos que pierdan calor y cuando estén templados, los desmoldamos y llevamos sobre una rejilla para que terminen de enfriar.

Ahora tenemos que dejarlos que se asienten hasta el día siguiente. Si lo hacemos antes, puede ser que el bizcocho se rompa y no podamos rellenarlo bien.

Déjalos tapados con papel de aluminio para que no se resequen.

 

ELABORACION DEL RELLENO (al día siguiente)

En el vaso de la batidora y con la nata muy fría (yo la dejo de 10 a 15 minutos antes en el congelador), la batimos hasta que veamos que empieza a espesar, entonces añadimos el azúcar y seguimos batiendo. Cuando veamos que está muy espesa, incorporamos el queso crema y batimos lo justo para mezclar.

Para rellenar los bollitos, puedes hacerlo con manga pastelera y una boquilla ancha. Iremos inyectando la crema en la base de la pantera: en los extremos y en el centro.

También puedes rellenarlo, haciendo un hueco con un descorazonador de manzanas y ayudándote a poner el relleno con una cucharita.

Volvemos a poner a modo de tapón, el trocito de bizcocho que hemos sacado con el descorazonador. Reservamos.

 

 

ELABORACION DE LA COBERTURA (al día siguiente)

Partimos el chocolate y lo ponemos en un bol que llevaremos al microondas. Vamos a ponerlo 30 segundos a potencia máxima, sacamos, removemos y volvemos a poner 30 segundos. Seguiremos hasta que el chocolate esté derretido.

Sacamos mezclamos bien y añadimos el polvo de remolacha. Te aconsejo que utilices unas varillas manuales, para que el polvo de remolacha se mezcle perfectamente. Puedes añadir un par de cucharadas de nata si quieres que la cobertura te quede mas blandita. A mí me gusta que quede crujiente. Si no le pones nata y dejas las panteras a temperatura ambiente, el resultado será muy parecido a cuando ponemos nata.

Ponemos los bizcochos sobre una rejilla y debajo un plato.

Vertemos el chocolate por encima cubriéndolo todo. Con cuidado damos unos golpes con la rejilla en la encimera, para que el chocolate resbale y llevamos a la nevera para que se endurezca.

A los 15 minutos lo sacamos y vamos a cubrir nuevamente con el chocolate para mejorar la cobertura.

Listo.

¡A DISFRUTAR!!

 

Olga