Vamos a endulzarnos el lunes preparando una sericaia, dulce típico portugués, típico de la zona de Alentejo, con un sabor y textura de lo mas delicado.

Las claras montadas a punto de nieve hacen que sea super esponjoso, y su sabor me recuerda al de las tortitas. Este dulce suele servirse con unas ciruelas en almibar, aunque con una bola de helado, un poco de nata montada, unas cucharadas de natillas o sin ningún acompañamiento, que es como a mí mas me gusta, te resultará igualmente bueno.

Ten en cuenta, que es importante que el pastel quede mas bien finito.

Empezamos.

 

INGREDIENTES

 

• 250 ml. Leche
• 4 huevos
• 35 gr harina
• 100 gr azúcar
• 1 palo de canela
• canela en polvo
• cáscara de limón
• mantequilla para engrasar el molde

 

En un cazo ponemos la leche a hervir, con el palo de canela y la cáscara del limón bien limpia y sin nada de parte blanca (yo utilizo un pelador de patatas). Dejamos cocer 5 minutos, retiramos del fuego y dejamos enfriar.

Vamos a engrasar con mantequilla una fuente que irá al horno. Espolvoreamos con harina para cubrir la base y las paredes del molde y retiraremos el exceso de harina poniendo el molde boca abajo y dándole un golpe seco. Reservamos.

Con la ayuda de unas varillas, vamos a batir los huevos y el azúcar hasta que tengamos una crema espesa y esponjosa.              

Añadimos la harina y mezclamos a mano con movimientos envolventes.

Retiramos la cáscara de limón y la canela de la leche y la añadimos al preparado anterior. Llevamos al fuego a baja temperatura y removemos constantemente hasta que tengamos una crema. Dejaremos que pierda calor.

Precalentamos el horno a 220 grados, con calor arriba y abajo.

Cuando este templado, montaremos las claras a punto de nieve. Vamos añadiendo cucharadas a la mezcla reservada con movimientos de arriba abajo para que no se bajen.

Volcamos la mezcla en el molde, espolvoreamos con canela y llevamos al horno 20 minutos. Listo.

¡A DISFRUTAR!!

 

Olga